Bitcoin: Una moneda para invertir de forma diferente

Invertir

Bitcoin:

Invertir o solamente utilizarla como un medio de pago adicional.” 

¿Sabes qué es el Bitcoin?

El Bitcoin lleva años entre nosotros y poco a poco se va haciendo más cotidiano entre la gente de la calle.

Tenemos asociada cada moneda a un estado. El dólar americano a EEUU, el Euro a la CEE, o la Libra a Reino Unido. Detrás de cada una de estas monedas, hay un gobierno. (Para ser políticamente correctos diremos un “banco central”) que regula dicha moneda y que vela por la misma.

En el caso del Bitcoin, sin ser la única moneda de este tipo en el mundo, hablamos de una moneda virtual. Que NO existe en papel moneda y que no tiene un gobierno o banco central, como tal detrás de la misma.

El Bitcoin es lo que se denomina como una “divisa electrónica”.

Como adelantábamos, presenta diferencias a todos los niveles con respecto al resto de monedas tradicionales, como que es descentralizada y nadie la controla.

No existe una fábrica de moneda como tal. Se generan mediante cálculos complejos realizados por ordenadores de gente y empresas alrededor de todo el mundo. Es un proceso que se denomina “minería de Bitcoins”. Realmente es un algoritmo matemático y a más recursos de computo se dedican, más Bitcoin se generan.

Seguramente te haces una pregunta al respecto y es: ¿Cómo puedo llegar a tener y hacer uso de esta moneda, a priori tan diferente? Y lo que es más importante ¿Por qué hacerlo?

Su uso es relativamente sencillo. Existen lo que se denominan “carteras” virtuales donde puedes disponer de tus monedas digitales.
Hacer uso de ésta para pagos en comercios y empresas de todo el mundo, de forma segura, rápida y sin comisiones (o muy bajas).

Algunas ventajas para que te plantees su uso pueden ser:

  • No hay intermediarios (y por tanto comisionistas que encarecen una compra como en las monedas tradicionales).

  • Las transacciones realizadas con ella son irreversibles. Da seguridad al vendedor de que no le van a cancelar el pago una vez enviada la mercancía.

  • Es, teóricamente, imposible de falsificar o duplicar dada su naturaleza criptográfica.

  • No requiere revelar tu identidad para realizar el pago con lo que tu identidad se protege siempre.

  • Nadie puede intervenir tus cuentas ni congelarlas, ante un problema económico.

  • Los pagos son casi instantáneos y en pocos minutos se efectúan en cualquier parte del mundo.

Pero también tiene algunas semejanzas necesarias con el resto de monedas.

La más importante: cotiza 24 horas al día, 365 días del año. Por tanto existe un valor de intercambio con otras monedas. Un Bitcoin tiene un valor en dólares que va cambiando a lo largo del tiempo, al igual que ocurre con el resto de monedas. Si te planteas invertir en ella, probablemente ya sepas que, “dicen”, está al nivel del oro y el dólar como mejor inversión…

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