El Cloud Computing es una infraestructura informática con dos caras: La primera, muy simple de cara al cliente, y una segunda, mas compleja, a nivel del proveedor de Soluciones Cloud como SomosCloud.
El Cloud Computing, tiene como finalidad ofrecer, a los clientes usen dicha infraestructura o parte de la misma como suya propia, de una forma simple, económica, flexible y segura.
Dicen, en tono de broma, que el Cloud Computing es el ordenador de otro. ¡Pero es que la broma es cierta! ahora bien, ese “otro” puede ser muy distinto cualitativamente y haciendo una analogía con los coches, los hay como un Renault5 viejo y que no funciona bien, hasta el último modelo de Ferrari. Sólo depende de qué proveedor de servicios quieras escoger.
En Cloud Computing los distintos proveedores de Servicios de Cloud (como SomosCloud) ofrece su infraestructura adaptada a las necesidades del cliente.
Si esta infraestructura se montase en el propio cliente implicaría el desembolso de un importante capital inicial en hardware, licencias, sistemas de soporte al harware, refrigeración, y todos los costes de mantenimiento asociados a lo anterior.
Por contra el Cloud Computing permite a los clientes disfrutar solamente de las ventajas: flexibilidad, alta seguridad, servicio 24 horas, dominio total… así que es más económico tenerlo externalizado. Además, siempre conviene tener copias de seguridad fuera de un mismo recinto por lo que pudiera pasar, y los proveedores de servicio contemplan esta y otras medidas de seguridad (impensables para la mayoría de las empresas), como lo normal en su funcionamiento diario.
Los Sistemas Cloud se personalizan para las necesidades exactas de cada cliente y además permiten modificarlos cuando las circunstancias, las necesidades o la operativa del cliente cambia con el tiempo.
Con Cloud Computing se pueden montar infinidad de servicios, como por ejemplo y por citar los más habituales:
- Servidores para empresas, para que los usuarios de la empresa trabajen directamente contra ellos, desde cualquier lugar, tipo de terminal y de forma segura.
- Herramientas de trabajo colaborativo, como ofimática, gestión, proyectos, ingeniería…
- Sistemas de backups.
- Repositorios de información accesibles en cualquier entorno y lugar (siguiendo las políticas de seguridad).
- Complejas redes para alojamiento de sitios web (cloud hosting).
Aunque hay muchos otros usos incluso más comunes que también son Cloud Computing (como el correo electrónico) y que de tan común, ni si quiera nos damos cuenta de que entra en la misma familia de servicios.
Una de las principales bazas del Cloud Computing es la gran flexibilidad que ofrece para crear y gestionar una infraestructura dinámica.
Otro de los sellos de identidad debe ser la seguridad. Normalmente se disponen de sistemas de duplicado de información, diferentes data-centers, acceso lógico y físico controlado, varias lineas de datos, sistemas de cámaras y mil elementos que para la mayoría de los no técnicos son “cosas raras o de frikis”.
Además el ahorro de costes es muy importante… siempre que comparemos manzanas con manzanas.
El Cloud Computing se usa para ofrecer diferentes tipos de servicio que se catalogan comunmente como: Plataforma como Servicio (PaaS), Infraestructura como Servicio (IaaS) o la más conocida, Software como servicio (Saas).
Dentro del Cloud Computing hay servicios para particulares, entre los que os sonarán ejemplos a todos pero por distintas razones no sirven y no deberían usarse para empresas, bien por su seguridad, fiabilidad, cumplimentación de las necesidades corporativas o simplemente por razones legales.
Por otro lado existen las Soluciones Cloud profesionales.
A esta última tipología es a lo que nos dedicamos en SomosCloud.