Transforma y Revaloriza Tu Empresa
¿Te has planteado cómo trabaja tu empresa y cómo lo hacen tus competidores?
No va a ser este el típico post, donde argumentemos sobre el retorno de inversión y otros parámetros de índole financiera con los que puede medirse el retorno de inversión de las herramientas de la empresa. El enfoque en cambio intentaremos que sea otro, bien diferente.
Depende de la edad que tengas. Tal vez rondas los veintitantos. En cuyo caso, difícilmente quepa en ti, la idea de una empresa sin correo electrónico, ¿verdad?
Sin embargo, hace unos 15 años, aproximadamente, muchas empresas utilizaban el correo postal y el fax para comunicarse con otros.
Tal vez seas algo más mayor y pasas la treintena. Posiblemente te tocó aquello del modem y esperar para poder ver una sola página web sin cortes. Antes de aquello había que llamar a todos los sitios o desplazarse hasta la ventanilla de turno para conocer, el B.O.E, una tarifa o simplemente si estaba autorizado el uso de cierto producto, para un uso dado.
Si tus sienes peinan canas y eres de los que hemos conocido las pantallas de fósforo verde, los discos de 5 ¼” o incluso tamaños mayores, no te tengo que contar, cómo y cuánto, ha avanzado la empresa. Cuidado que no hablo de tecnología, sino de la empresa, eso sí, avances mayormente motivados por la adopción de tecnologías.
No hace tantos años, los pocos que usábamos los primeros smartphones, éramos tratados de “Freakies” (no negaré que algo, lo éramos…) y de como un buen amigo, me decía que eso, era casi cosa de brujas y que se negaba a hacerse a la idea de que en 10 años todos llevaríamos uno en el bolsillo. Incluso a mí se me antojaba utópico, pero…sucedió.
Era impensable que los no cercanos a la tecnología, se hiciesen a usar de forma continua, un “aparatejo” de esos.
Ya en 2017, nuestra forma de trabajar, ha evolucionado de una forma tan radical, que probablemente un buen profesional, experto en su trabajo, de hace 20 años, no sería capaz de empezar a trabajar en una empresa actual.
Hace 20 años, si un cliente tenía una reclamación, y no se presentaba en la propia empresa, lo solía hacer por correo postal (sí, ese donde se ponía el sello y esas cosas) y no era de extrañar si la contestación llegaba pasadas varias semanas. A día de hoy, muchas reclamaciones tienen que resolverse en tiempo real o como mucho en unas horas. Sino, la percepción de valor por parte del cliente cae rápidamente.
La tecnología, conlleva un aumento de la productividad, y otra forma de hacer las cosas. Sin cambiar radicalmente los usos y costumbres del usuario, te facilitan la vida laboral y aportan mayor valor a la empresa.
En los albores de la tercera década del siglo: ¿Te has planteado cómo trabaja tu empresa y cómo lo hacen tus competidores? Dedícale un rato. Tal vez sea un tiempo muy bien empleado y rentable.
¿Aun estás atad@ a la tecnología del siglo pasado? Permítenos mostrarte lo que podemos hacer por ti. Contactar
